Por : Guillermo Pérez Herrera
PROGRAMA DE ACCIÓN
SINDICAL, COOPERATIVISMO Y ALIANZAS SOCIALES
- JUSTIFICACIÓN
Sindicalismo y
cooperativismo tienen un mismo espacio de representación, a través de la OIT , y esto se ha reafirmado
mediante Recomendaciones emanadas de la
OIT , como la
Recomendación 193 – 2002, que recomienda a los países del
mundo emplear el sistema cooperativo, como una forma de lucha contra la pobreza
y de generación de empleo, y que en el caso del Perú poco se ha hecho desde el
Estado para su cumplimiento.
La política
neoliberal implementada por el gobierno fujimorista no solo hizo tabla rasa con
los derechos laborales, que los flexibilizó a tal punto que las generaciones
actuales carecen de derechos que en todos los países del mundo se respetan como
la jornada de las 8 horas, libertad sindical, etc. Añadiéndose el mal uso de
las llamadas “cooperativas de fomento del empleo” que terminaron siendo
fachadas de services, generadas por las propias empresas para burlarse de los
derechos laborales, entre ellos de la libertad sindical.
El sindicato debe
ser el medio de defensa de los derechos laborales, y la cooperativa debe ser el
instrumento para la satisfacción no solo de necesidades económicas inmediatas,
sino el medio para la generación de emprendimientos colectivos, e iniciativas
empresariales, actividades que el sindicato por su naturaleza, no puede
hacerlo, es decir sindicato y cooperativa deben de ser dos bazos de un mismo
cuerpo, el trabajador.
El
sindicalismo peruano es consciente que los sindicatos deben estimular a sus miembros a
formar cooperativas en las áreas que sirven a sus necesidades. La propiedad y
gestión de empresas por los trabajadores puede ser socialmente benéfica,
asimismo, la integración de los trabajadores/as informales en cooperativas.
En esta
lógica el PROSIE (Programa Sindical en la Economía Informal) en el
marco del cumplimiento de la
Recomendación 193 - 2002 de la O.I .T., viene generando un proceso que
incorpore este componente estratégico,
vinculado a la economía solidaria, en el accionar sindical, teniendo en cuenta que
empleo informal en
el Perú, se encuentra concentrado en la microempresa (20%), en el grupo de
independientes o autónomos (36%), así como en los propios TFNR (16%). Así,
podemos deducir que la informalidad en el Perú bordea el 73% de la población
ocupada. (Caracterización y problemática de los trabajadores de la economía
informal en el Perú-Informe Consejo Nacional del Trabajo).
Bajo ese mismo criterio, en Lima
Metropolitana la tasa de informalidad ascendió a 59% en el 2007, tasa menor a
la registrada a nivel nacional, principalmente por el predominio de
trabajadores familiares no remunerados en las zonas rurales del país. Asimismo,
en los últimos doce años la informalidad en Lima Metropolitana se ha mantenido
en niveles elevados, aunque con una muy ligera tendencia decreciente.
Sin embargo, la promoción de cooperativas, debe efectuarse, no solo en la economía
informal y el autoempleo, sino debe formar parte, de la construcción de una
alternativa programática de desarrollo con equidad, en una nueva visión
económica para el país.
Los sindicatos y las
cooperativas, trabajando mancomunadamente, pueden modelar las direcciones
futuras del crecimiento. Lo que se necesita esencialmente, es dar contenido y
forma a la cooperación mutua y a las acciones e iniciativas conjuntas.
En la perspectiva de un
trabajo específico en el campo cooperativo, debe impulsarse las
disponibilidades de crédito y de otras facilidades financieras para las
cooperativas evitando sean desarrolladas en función de las condiciones del
mercado, por lo cual, la especificidad de las cooperativas tendrá que ser
considerada adecuadamente.
EL PROSIE sostiene que el
uso por parte de las empresas de las denominadas cooperativas de fomento del empleo, para su
trabajo tercerizado, sin beneficios ni protecciones para los trabajadores, debe
ser enfrentado a través de una normatividad específica y una adecuada
vigilancia, traducida en un sistema de inspecciones laborales eficaz, eficiente
y transparente, exigiendo que estas llamadas “cooperativas de fomento del empleo” cumplan con la
renovación democrática por tercios y la participación de los socios en la
dirección de la empresa y en la justa distribución de utilidades.
La propuesta de acción
sindical en el cooperativismo, se articulará a otras organizaciones y redes
sociales , como el Grupo de Trabajo Solidario, GTS, integrado por
organizaciones como la
CONACOOP (Coordinadora Nacional del Cooperativismo Peruano),
el Colegio de Licenciados en Cooperativismo, la Federación de
Cooperativas de Servicios Múltiples, Federación de Cooperativas de Servicios
Especiales, Red de Recicladores de la Margen Izquierda
del Río Rímac, KADIPS, FyG Consultores en Políticas Sociales y Comunicación, APTTA, la Asociación Juvenilla Red Popularla Asociación Parada
El presente programa de
acción, se orienta en función a las consideraciones antes mencionadas.
- Objetivos
del Programa
2.1.
Efectuar una Campaña de Sensibilización Social, orientada a
difundir la opción cooperativa, como un modelo alternativo de desarrollo
económico y empresarial, en el campo del empleo, con equidad de género y el
pleno cumplimiento de la
Recomendación 193-2002-OIT.
.
2.2.
Implementar acciones de capacitación cooperativa (Doctrina,
Principios, Valores, Historia, etc.) dirigidas a trabajadores de la economía informal,
despedidos afectados por la crisis financiera internacional, para
su posterior reinserción laboral, trabajadores discapacitados, de la
tercera edad, jóvenes, bajo un enfoque de género en Lima y Tres regiones
priorizadas del país.
2.3.
Constitución de Cooperativas de Trabajo e Inclusión Social y de
Servicios Múltiples, en función a necesidades y demanda participativa.
2.4.
Constitución de una Plataforma Social Solidaria en apoyo a la
acción cooperativa.
2.5.
Elaboración de medios y materiales de comunicación y educación,
que promueva los contenidos y visión solidaria del cooperativismo.
- Duración
El inicio deseable sería el 1 de abril del 2011, extendiéndose por
un año hasta marzo del 2012, donde se evaluarían resultados e impactos.
- Estrategia
de Implementación
4.1.
Diseño del Plan Operativo
con participación de actores involucrados
4.2.
Reuniones de Trabajo y cabildeo para organización y articulación
de operaciones
4.3.
Instalación del Centro de actuación del programa.
4.4.
Apertura de Servicios Profesionales para ejecutar actividades
4.5.
Convocatoria de actividades
4.6.
Ejecución operacional
4.7.
Monitoreo y Evaluación (De campo, presencial y virtual)
4.8.
Sistematización y Validación de las actuaciones
4.9.
Evaluación Final
- ACTIVIDADES
PROPUESTAS
5.1.
Constitución e Instalación del equipo de Coordinación del Programa
5.2.
Elaboración del Plan de Campaña de Sensibilización
Estudio de Investigación Acción
Elaboración de Contenidos
Producción de Materiales (escritos, de audio, audiovisuales y
virtuales)
5.3. Implementación del
Plan de Capacitación
10 Talleres en Lima Metropolitana
6 Descentralizados (3
Regiones del país debidamente priorizadas)
2 Encuentros Nacionales
5.4. Constitución y puesta en funcionamiento de
la Plataforma Social
Solidaria
5.5. Reuniones de
contacto y promoción para la constitución de Cooperativas de Trabajo e
Inclusión Social, y Cooperativas de Servicios Múltiples-
5.6. Acompañamiento
para proceso de constitución y puesta en funcionamiento de Cooperativas
Meta específica:
6 en Lima Metropolitana- 6 en Regiones priorizadas
5.7. Elaboración de
Materiales educativos y de comunicación
Meta específica:
4 cartillas- 6 Folletos- 10 Trípticos divulgativos
Mil ejemplares por cada uno de los medios.
5.8. Plan de Monitoreo y
Evaluación
5.9. Elaboración de
Informes (Específicos de actividad, Semestrales, anual)
5.10 Evaluación
presencial del programa (Semestral-Anual)
- Responsabilidades
Coordinación General: PROSIE-GTS-OIT
Coordinación Ejecutiva: Coordinador designado por responsables del
Programa
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