Nombramiento de Nadine en PNP genera controversia

Miercoles, 01 de enero de 2014 | 4:30 am

Polémica. Como se preveía, oposición dice que nuevo cargo que asumirá Heredia es incompatible con rol de primera dama.
Polémica. Como se preveía, oposición dice que nuevo cargo que asumirá Heredia es incompatible con rol de primera dama.

Dudas. Secretario general de PP, Luis Thais, dice que pedirá analizar la situación. Cecilia Blondet y Percy Medina: Nada le impide asumir ese cargo.
A las críticas de apristas y fujimoristas a la designación de Nadine Heredia como presidenta del Partido Nacionalista, por considerar que sería un primer paso hacia una eventual candidatura presidencial de la primera dama en el 2016, ayer se sumaron los cuestionamientos de Perú Posible.
El secretario general del partido de la chacana, Luis Thais, opinó que es incorrecto que Heredia ejerza simultáneamente la presidencia del PNP y la función de primera dama, pues afecta la igualdad que deberá haber en la competencia entre partidos.   
"A ella, siendo primera dama, el Estado le organiza los mítines, viaja con dinero del Estado, va a entregar cosas. Eso no puede ser. Ella debería elegir uno u otro", dijo y advirtió que ante esta situación su partido podría dejar de apoyar al oficialismo.
Thais agregó que esta situación se agrava debido a que Nadine Heredia no es funcionaria pública y, por tanto, no tiene que rendir cuentas ante ningún poder del Estado.
"Si yo fuera primer ministro, tendría que dar cuentas al país... ella ni siquiera da cuentas al país", acotó.
En ese sentido, adelantó que pedirá a la comisión política de PP analizar esta situación, y hacer un pronunciamiento claro, que podría incluir el distanciamiento entre ambas agrupaciones.
Pese a estos cuestionamientos, Cecilia Blondet (ProÉtica) y Percy Medina (Transparencia Internacional) recordaron que no hay ningún tipo de impedimento para que la esposa del presidente de la República asuma un cargo público.
Medina, incluso, recordó que Nadine Heredia es fundadora del Partido Nacionalista y "una reconocida" dirigente política de esa agrupación, por lo que –opinó– a nadie le debería sorprender su designación en un cargo partidario.
Ambos agregaron, no obstante, que para evitar suspicacias y desconfianzas, la primera dama deberá diferenciar correctamente las actividades que realice como tal y las que tengan carácter partidario.
"Va a tener que cuidarse mucho para que no haya conflicto de intereses. Quizá sea buen momento para tener mucha transparencia e información muy clara y abierta de las cosas que está haciendo como primera dama", dijo Blondet.

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