ELECCIONES EN REINO UNIDO : LA POLÉMICA SOBRE LA INMIGRACIÓN

Elecciones en Reino Unido
La polémica sobre la inmigración toma cuerpo en la campaña británica
El problema de los ilegales provoca enfrentamientos en el tercer y último debate electoral
Cortesía : EL PAÍS
La campaña de las elecciones británicas del 6 de mayo ha llegado a su punto culminante con el tercer y último debate televisado, centrado en la situación económica, aunque dominado al final por la inmigración, un tema que va tomando cuerpo en la recta final de la campaña electoral. Pero el debate ha estado lejos de suscitar la excitación de los dos anteriores.
La polémica más ardiente ha llegado casi al final del debate, cuando el conservador David Cameron ha defendido la imposición de un tope a la llegada de inmigrantes y ha calificado de "amnistía" la propuesta liberal de regularizar a los ilegales que llevan años en el país. Nick Clegg, líder liberal-demócrata, le ha respondido: "Están aquí, es un problema que vosotros creasteis y hay que afrontarlo: hay que sacarlos de manos de los criminales y ponerlos en manos de Hacienda". Y ha retado a Cameron a que admitiera públicamente que el tope que pretende imponer no tendría consecuencias porque el 80% de los inmigrantes proceden de la UE y no se les puede impedir la entrada.
Gordon Brown también ha criticado la regularización porque atraería más ilegales. Pero ha rechazado el tope que proponen los conservadores con el argumento de que el nuevo sistema de puntos ya es suficiente para frenar la llegada de inmigrantes que no son necesarios.
La cuestión de la inmigración irrumpió con fuerza en la campaña británica el miércoles, cuando Gordon Brown fue interpelado por una votante de 66 años en Rochadle. Brown habló despectivamente de ella al entrar en su coche, sin darse cuenta de que sus comentarios, que él creía privados, se estaban grabando porque aún tenía un micrófono en la solapa.
El candidato laborista ha aludido a ese incidente en su primera intervención: "Como visteis ayer, no todo lo hago bien, pero sé cómo hay que gestionar la economía cuando hay problemas". Enfatizó la mayor diferencia que separa a conservadores de laboristas: "No permitiremos que la economía caiga por segunda vez en recesión". Y ha criticado la propuesta de los conservadores de recortar de inmediato 6.000 millones de libras (casi 7.000 millones de euros) de gasto público si ganan las elecciones.
Los otros dos líderes también han subrayado el núcleo duro de su programa económico. Cameron, que ha abierto el debate, retransmitido desde Birmingham por la BBC, ha hecho hincapié en la importancia de "premiar el trabajo y el esfuerzo y evitar que la gente recibe subsidios que no merece". Nick Clegg ha subrayado sobre todo el mensaje de que "tenemos que hacer las cosas de otra manera, ser sinceros con los recortes presupuestarios que tenemos que afrontar, dividir nuestro sistema bancario" y defendió, sobre todo, la idea de que el sistema fiscal "tiene que ser justo".
Inevitablemente, la primera pregunta del público se ha referido a la ausencia de detalles en sus propuestas de recorte del gasto público. El agujero presupuestario de las finanzas públicas es de 71.000 millones de libras (82.000 millones de libras), pero los partidos aún han de identificar de dónde sacarán ese dinero: qué gastos públicos recortarán y qué impuestos subirán.
Pero en sus respuestas no han aportado nuevos datos significativos. Clegg ha recordado los ahorros ya identificados en su programa electoral, Brown ha recordado su compromiso de no recortar el gasto en los servicios de primera línea en Educación, Sanidad pública y Policía, de congelar los salarios públicos y la reforma del sistema de pensiones. Y Cameron ha aludido a sus propuestas de congelar los salarios públicos en 2011 y retrasar un año la edad de jubilación. "No son medidas populares, pero hay que tomarlas", ha dicho.
Cameron ha retomado su idea de recortar de inmediato el gasto público para no subir el año que viene las cotizaciones sociales. A lo que Brown le ha contestado: "En Francia, en Alemania y en América dicen que no hay que cortar ahora los apoyos a la economía, es el mismo error que los tories han cometido tantas veces en el pasado. Tenemos que apoyar la economía para asegurar la recuperación y luego aplicar mi plan para reducir el gasto en cuatro años", ha insistido.
Otra pregunta se ha referido a la creciente presión fiscal a los trabajadores. Brown admitió que la recesión ha sido difícil para los trabajadores pero que los conservadores van a bajar los impuestos a los ricos. "El contribuyente está pagando mas porque el Gobierno ha estado despilfarrando más", le respondió Cameron. "El sistema fiscal es grotescamente injusto: un millonario de la City paga menos proporcionalmente que una limpiadora. Hay que cerrar esos agujeros legales y devolver el dinero a la gente, a la inmensa mayoría de la gente como tú", le ha dicho Clegg a la chica que había formulado la pregunta.

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