PANTALLAZO 8 : LLUVIA EN LIMA...EL ESPEJO DEL ALMA COLECTIVA

por : Marcial Guillermo Pérez Herrera
Estos dos últimos dias , mejor diría en sus tardes, estuve por dos distritos del llamado pujante cono norte de Lima, me refiero a Carabayllo y Los Olivos, plenos de población trepidante y ansiosa, masiva concurrencia de cristianos y gentiles, confundidos, unos entre otros, con los rostros meditantes y preocupados de un enemigo invisible que los persigue, caminando sin cesar apresurados, paranoicamente desesperados, por llegar, no se sabe donde, ni sabe cuando, pero alli, dándole duro a las suelas y a los espasmos de vaho personal y nebuloso.
Y es que el panorama era muy especial, ¡ llovía en Lima!, en unos espacios, más zizagueante y puntillosa, pero, lluvia al fin, fina, aguzada, "cachosa" (léase burlona y provocadora), violentando paciencias, empujando al sueño sonámbulo de los de a pie y descarado y roncador de los viajeros de transporte público, que a sus largas horas de estar sentados ( o aveces eternamente parados), le sumaban, esa especie de éter con sabor a "pepeo" (tradúzcase como hacerte dormir sin quererlo con un par de somníferos, generalmente combinados con alcohol, por manos candorosas de damiselas subcontratadas generosamente, para placer y ocio y que luego te voltean y roban hasta el alma), que suele transmitir esta lluviecilla mazamorrera y meláncolíca de nuestra bien amada "Ciudad de los Reyes", hoy devaluada por todo tipo de crisis , en especial, las que transmiten los , cada vez, más pendencieros y alucinógenos medios de comunicación masiva.
En ese transcurrir , rodeado de todo tipo de actividad comercial, variopinta, calcutesca y desenfadada, me quedó ganas de apreciar, que de grande, es hoy, esta ciudad, sospechando que los datos que nos dan las estadísiticas oficiales, agonizan de error y mal cálculo, cual si la h1n1 (mal llamada gripe porcina), las haya devorado hasta hacerlas morir y resucitar para ver lo cadavérico de sus aprontes. Los ululares de cientos de microbuses, agitando consignas , de rutas, ofertas de "chinita" ( en argot popular, 50 centavos de sol) pa' llegar rapidito y baratito, o los clásicos " causita " (amigo de manera confianzuda) " tio" ( que a diferencia del vocablo jerguero español, que expresa familiaridad con alguien, aqui es sinónimo de varón algo usadito), enredado con las ofertas de chicles, caramelos, refraneros pedidos de ayuda o el clásico ¡colabórame varón, señorita, estudiante o trabajador, pa' salir de mi situación pe...!. Todo, envuelto en un cómodo relleno, tipo empanada de a sol, de esa que nos engullimos, cuando el hambre aprieta , sin preguntar procedencia, nacimiento o componentes, total si llena , echele pa lante. Todo en medio de una oscuridad pasmosa, prematura y envejecedora de esperanzas y alegatos de cambio o desarrollo, embarradas callejeras, por esa lluvia, esa prima lluvia opereteada, al estilo de una pieza wagneriana, grave y remecedora de almas y psiquis enjauladas en aromas de todos los olores y sabores, amalgamadas con los humores, de falta de agua y linimentos apropiados de higiene olvidada, pero siempre listas para actuar, cuando de seguir caminando en zapatillas y zapatitos chinos se trata, total, estamos en Lima, y ¡punto! y si mañana me da la gana, me envalentono, hago mis "juntitas" y me largo a pisar suerte en Madrid, Milan , Buenos Aires, Santiago o la mismisima China, combinada con sushi japonés, ¡Es la globalización, la modernidad! , el sueño de una tarde, de malgastado invierno citadino y adobado en sueños sin retorno y seguramente atrapado en la odisea sin héroe ni ganadores, sólo eso...pan con lluvia garuesca y sofisticada, de doncella versallesca, caída en desgracia, de todas las sangres y de ninguna, de los rupertos y de los eslevan , de los jhonny y las lissete, de los tirios y troyanos acriollados en enfundadas casaquillas, que la cara les cubre y el alma les oculta, de los llantos, de las violencias sin denuncia, de los sufrimientos, de las brutales y mortales exclusiones y autoconfesiones deshonestas, de los que estiran la mano y nada encuentran, de los burgueses etiquetados que deambulan cual aliens tambaleantes, en los pasillos de los territorios, de las cortes judiciales, de los caminos oscuros y aparasitados de los parlamentos, las adocenadas ergastulas de cemento, etiquetadas de estado tambaleante y matonesco, de las niñas sin llanto, de los que vienen y los que se van, de los que trabajan al estilo de siglos feudales, sin recibir pernada a cambio, sino palmaditas retrecheras en el hombro, de todos y todas, los que dormimos en tal vez, sabe donde, y que sabemos que tenemos que despertarnos, en fin...sin que parezca depresor, ni adobadamente negativo, asi son estas tardes, de lluvia impertérrita, limenísima y hetairísima, finísima pero chacaloncísima, misteriosísima pero ..tremendamente jodidísima...

¡Chau!...(queridos hermanos, al estilo "hermano pablo")... me voy con mi garúa a otra pàrte....

Comentarios