COMUNIDAD ANDINA : AVANCES Y RETROCESOS

INSTITUTO LABORAL ANDINO (ILA) - BOLIVIA, COLOMBIA, ECUADOR, PERÚ, VENEZUELA
Comunidad Andina: Avances y retrocesos
Por Carlos Ortiz Cornejo (*)
Informaciones del ILA editadas en Rebanadas:
CORTESÍA :Rebanadas de Realidad - ILA
Hace poco se llevó a cabo en el frontis de la Iglesia de San Francisco de Lima una Sesión Solemne por el Día de la Integración Andina. Participaron algunas de las organizaciones e instituciones que conforman el Sistema Andino de Integración (SAI), entre las que se encontraba el Consejo Consultivo Laboral Andino, (CCLA) así como, algunas autoridades políticas de los países de la Comunidad Andina (CAN). El discurso de orden en representación del Presidente de la República del Perú fue el Viceministro de Relaciones Exteriores, es decir, que el Canciller de la República no tuvo tiempo, mucho menos el Presidente porque ellos están sólo preocupados en preparar la Cumbre de la APEC y, para eso si tienen tiempo y hacen mucha propaganda sobre las bondades que nos dará este espacio de libre comercio. Para eso se ha colocado en el Palacio de Gobierno todas las banderas de los países que lo conforman, con lo que no estamos en contra, pero cuando se realizó la V Cumbre de ALCUE o cuando se realizan las reuniones de la Comunidad Andina no existen banderas que nos identifiquen en Palacio de Gobierno, mucho menos, propaganda alguna en los medios de comunicación.
Como todos saben, la Comunidad Andina es el proceso de integración más antiguo que queda ha cumplido 39 años desde la firma del Acuerdo de Cartagena. Durante este largo proceso la CAN ha sufrido diferentes problemas como lo hemos señalado, siendo uno de los golpes más duros el retiro de la República Bolivariana de Venezuela, pero aún así, ha logrado sobrevivir no obstante el poco interés que algunos mandatarios le han puesto a este proceso porque tienen mayor interés en los tratados de Libre Comercio con los Estados Unidos, con Chile y Canadá.
Decía en ese momento el Viceministro, que el Perú, conjuntamente con Bolivia, Colombia y Ecuador, están comprometidos desde hace casi cuatro décadas con el esfuerzo de construir un sistema de integración y cooperación que fortalezca el desarrollo económico, equilibrado y armónico de nuestros países -lo cual compartimos plenamente en el CCLA- y lo único que habría que hacer es ponerlas en práctica porque la integración constituye un mandato histórico, fundado en los principios de igualdad, justicia, paz, solidaridad, democracia, preservación de la soberanía e independencia que muchos presidentes pasan por alto dando prioridad sólo al crecimiento económico y no al desarrollo de nuestros países olvidándose que los procesos y las políticas de integración, Regional y Subregional en este caso, son indispensables para lograr un desarrollo equilibrado y armónico de nuestros pueblos y así poder aprovechar en mejores condiciones las oportunidades que ofrece la globalización, como ellos dicen.

En ese contexto promueven un proceso de integración andina basado en el concepto de "regionalismo abierto", que consolida espacios políticos, económicos, comerciales, sociales y culturales y, al mismo tiempo, sirve como plataforma para asociaciones más amplias y complejas. Es así, que el espacio andino debe estar abierto y relacionado de manera multidimensional entre sí y con el mundo en las diversas facetas que abarca su variada hoja de ruta como señalaba el Viceministro que aseguraba que en el "regionalismo abierto" que el Perú propugna no se contrapone en la consolidación del mercado interno y la apertura al mercado mundial. Ambas son caras de una misma moneda, -lo cual nosotros no lo vemos de esa forma, porque no es cierto-. Basta analizar un poco los TLC firmados por los gobiernos de Perú y Colombia con los Estados Unidos donde no se contempla en lo mínimo los temas sociolaborales existentes en nuestras legislaciones, tampoco la seguridad alimentaria, ningún apoyo al agro que quedará en desventaja porque sólo se piensa en la agro exportación, aunque no quede nada para el consumo interno, pero lo que si se asegura es las ganancias a las empresas transnacionales de la alimentación.
Donde coincidimos es que nuestra "agenda andina interna" debe apuntar a consolidar el espacio económico Subregional, garantizando la libre circulación de bienes y servicios, la competitividad y la modernización productiva, pero también, la circulación de personas. La agenda externa debe apuntar a la diversificación comercial de las economías andinas a través del establecimiento de acuerdos comerciales con los principales actores mundiales, mejorando así la capacidad de la Comunidad Andina de competir a escala internacional. Es verdad que nuestra visión de la integración debe ser moderna, ágil y realista pero debemos buscar para nuestros pueblos desarrollo, empleo con derechos y no lo que está ocurriendo en la Subregión con la pérdida de empleos y el aumento de los pobres a gran escala y, sobre todo, la exclusión de millones de personas de las bondades del crecimiento económico al que se refieren casi a diario algunos de los gobiernos de la CAN como es el caso del Perú.
Es cierto que todo este proceso económico-comercial, debe estar acompañado por una agenda política y social articulada alrededor de cuatro ejes: la lucha contra la pobreza y la promoción de la inclusión social, el medio ambiente, el desarrollo fronterizo y la integración en infraestructura. Es verdad que el mayor logro de la Comunidad Andina es haber construido, en base al Protocolo de Trujillo, un andamiaje institucional importante como es el Sistema Andino de Integración, conformado por una diversidad de instancias como el Consejo Presidencial; el Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores; la Comisión; la Secretaria General; el Tribunal de Justicia; el Parlamento Andino; los Consejos Consultivos Empresarial, Laboral e Indígena; la Corporación Andina de Fomento; el Fondo Latinoamericano de Reservas; el Convenio Simón Rodríguez, los Convenios Sociales que se adscriben al SAI como son el Hipólito Unánue en materia de salud y el Andrés Bello en materia de cultura y; la Universidad Andina Simón Bolívar.
Se han hecho esfuerzos importantes para conformar una Política Exterior Común y se tiene relaciones con Chile y MERCOSUR como Miembros Asociados; con México y Panamá, como observadores, además de las negociaciones UE-CAN que están detenidas hasta este mes de septiembre, según afirmó el Secretario General de la CAN. También notamos que algunos países mantienen relaciones comerciales con Centroamérica, Rusia, China, India, entre otros actores internacionales claves.
Resultan elementos esenciales en ese andamiaje los avances que se ha logrado a través de la Carta Andina para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos que el CCLA viene exigiendo sea revisada y el Compromiso de la Comunidad Andina por fortalecer la Democracia. En lo que se refiere a la agenda social el CCLA viene trabajando 5 ejes temáticos sociolaborales: Seguridad Social; Migraciones; Empleo Digno o Decente como lo denomina la OIT, Formación Profesional. Salud y Seguridad en el Trabajo que ya se ha convertido en una norma comunitaria de obligatoriedad para los países que conforman la Comunidad Andina. En el caso de Migraciones hemos presentado documentos y exigido respeto a los derechos humanos por parte de la Unión Europea al adoptar la Directiva de Retorno.

En materia económica, destaca nítidamente la Zona de Libre Comercio Andina, la cual debemos continuar perfeccionando, impulsando las armonizaciones aduaneras, sanitarias, fitosanitarias y de reglamentos técnicos, fundamentales para el comercio de bienes. Debemos seguir impulsando la liberalización del comercio de servicios y la integración en materia de infraestructura y de desarrollo fronterizo.
Puso mucho énfasis el Viceministro al señalar lo que constituye para la Comunidad Andina lograr a la mayor brevedad posible la suscripción de un Acuerdo de Asociación con la Unión Europea -esperamos que sea para el primer semestre del 2009- lo que consolidará la relación estratégica con esa importante región del mundo. En ese esfuerzo creemos que debemos ser lo suficientemente imaginativos y pragmáticos para acomodar las sensibilidades de todos, pero al mismo tiempo, permitir que el nivel de ambición de aquellos que deseamos un acuerdo integral e incluyente no se vea frustrado y que en ese acuerdo CAN-UE no debemos soslayar ninguno de sus elementos: el libre comercio, la cooperación técnica y la cooperación política, pero también, un pilar sobre derechos laborales en la que se alcancen acuerdos en temas tan relevantes como la migración.
Hay que dar paso a objetivos de largo plazo, a una visión estratégica de la integración andina, superando la urgencia del corto plazo, de la coyuntura, de los individualismos y de la visión sectorial que parece que a algunos gobiernos les interesa. Debemos conciliar las diferentes visiones que responden legítimamente a intereses propios y aspiraciones válidas de nuestros pueblos, pero antepongamos a ello un desafío mayor, no exento de la grandeza de los eventos que han distinguido a la historia común de nuestras naciones y que han precedido nuestras acciones, el de seguir construyendo un futuro colectivo que asegure el bienestar permanente y auto sostenible de nuestra Subregión, que ese "vivir bien" al que nos convoca el Secretario General de la CAN se traduzca en la generación de desarrollo con crecimiento económico y respeto a los Derechos Humanos, que permita crear más empleo, reducir la pobreza que aqueja actualmente a la mayoría de los pueblos que conforman la Comunidad Andina. Compartimos que nuestra unidad andina sea una unidad en el progreso, que permita a las grandes mayorías incorporarse ya a los beneficios de la globalización con igualdad de oportunidades para mujeres y hombres.
(*) Director General del ILA y Secretario General Adjunto de la Federación Gráfica del Perú. /
Web

Comentarios